El tenis de mesa o ping-pong, es una adaptación del deporte conocido como tenis, se juega sobre una mesa rectangular y los jugadores utilizan paletas de madera para golpear una pequeña pelota de plástico de 40 milímetros de diámetro.
El objetivo en el tenis de mesa es el mismo que en el tenis convencional, se debe hacer rebotar la pelota primero en su propio campo, para que luego rebote en el campo del rival. Los jugadores golpean la pelota alternadamente, cuando uno de los jugadores no consigue devolver la pelota, su oponente logra un punto. Los puntos, en el tenis de mesa, se contabilizan de a uno. Para quedarse con un set, un jugador debe obtener once puntos, de acuerdo al tipo de torneo. El ganador del encuentro es quien suma dos, tres o cinco sets, según la competencia.
Al igual que en el tenis, el ping-pong puede jugarse de modo individual o en pareja, los partidos de dobles exigen que los jugadores golpeen la pelota de forma alternada.